miércoles, 25 de septiembre de 2019

Escribir

A mis pocos y abandonados lectores sólo pedirles perdón por no acudir a una cita que debería siempre ser periódica. En este mundo cambiante siempre algo que decir, además en este universo cibernético se tienen las herramientas pare hablar con libertad, para escribir de forma pausada y libre, expresar esa opinión, única, porque es aquella forjada por tu opinión, con el mero propósito de dar a conocer lo que uno piensa, sin buscar aprobación y aún menos reprobación.

Así, como un figurado Magistrado del Supremo, pretendo volver a dar mi opinión reposada y sincera sobre esos muchos temas que ahora bullen. Mojarme en temas de actualidad, o en matices de mi actualidad. Asuntos cercanos y muy conocidos por mi como el Turismo, o quizás, políticos como la repetición de las elecciones o Cataluña, e inclusive de asuntos más lejanos pero no menos perturbadores como los gemelos anglosajones que rigen los destinos de los Estados Unidos o Gran Bretaña.

Me perturba la falta de profundidad de la política actual, aquí y fuera, los argumentos simplistas, los políticos de tweet como dice mi querido Eduardo. Me ilusiona, al mismo tiempo que aterra, la tecnología y sus nuevos retos. Me preocupan los extremos pues siempre son los del otro, la incapacidad de escuchar o sencillamente, lo que para mi es la base de cualquier convivencia civilizada, el respeto por el contrario.

Por todo, y después de más de un año sin mojarme, sólo pedir perdón a la vez que respeto por escribir algo distinto de lo que esperabas leer. Por expresarme humildemente desde mi portátil, por contar aquello que me sale compartir, por que esta humilde alma verdiblanca, por la gracias de Dios, cree que debe poner una microgota de opinión en este universo de locura.